Wilmar Everton Cardaña era hombre de pocas palabras, muy pocas, como todo hombre criado en el campo, entre vacas y animales poco propensos al diálogo. Creo que hasta ese día -y ya llevábamos más de dos años de amistad-, sólo le había contabilizado nueve palabras, monosilábicas en su mayoría. Y vale consignar que más de la mitad de ellas las había gastado en una sola frase, previa a otro partido importante, cuando levantándose imprevistamente de una tertulia, anunció: "Permiso, voy a ir al baño".
Game | Time | WPM | Accuracy |
---|---|---|---|
1181 | 2025-06-19 14:21:56 | 70.85 | 98% |
1167 | 2025-06-19 09:19:31 | 62.21 | 96% |
1003 | 2025-06-03 09:49:51 | 64.18 | 96.6% |
115 | 2024-07-11 14:36:18 | 50.70 | 96.1% |